Este es un acto que dedico a las mujeres luchadoras que
hacen del mundo algo mejor; en especial:
A la señora de
sonrisa estrecha y corazón gigante, la
que en solitarias noches encontraba las salidas a los laberintos de la vida, la
que con su amor definió mi camino; mi madre Cony, que lamentablemente ya no
está físicamente.
A la compañera
hermosa de dermis y epidermis, la que ha sacudido mi humor, contrariado mi
lógica y convertido caminos inciertos en fuentes de luz y sosiego; mi compañera
de vida Lorena.
A la niña que vino
envuelta en ilusiones, la que desde su llegada al mundo me robó el corazón y
aun ablanda mi alma, mi niña por siempre, mi bendita Karlita.
Al soplo de
alegría, que convirtió en primavera el amenazante otoño, el pequeño milagro que
iluminó de nuevo mi espíritu y me hizo confirmar lo bella que es la vida; mi nieta Sofía.
Agradezco al hacedor de universos
y a todas las colectividades y personas que con energía positiva contribuyeron
a la realización de este trabajo. Y hago
un reconocimiento especial al amigo, profesor y asesor de esta tesis doctoral,
que se adelantó en el andar hacia las estrellas, el Doctor Juan Alberto
Martínez y, con mucho cariño, a mi hijo Byron una muestra viviente de que la
creatividad fluye mejor en las almas nobles, desinteresadas y abiertas.
La tesis
doctoral se titula Análisis de las bases epistemológicas e institucionales en
la enseñanza del diseño y la creatividad. En ella se incluye la Propuesta
de criterios para la formulación integral de políticas institucionales para el estímulo de
la creatividad. Debo enfatizar que en el estudio de casos, la investigación de
campo se aplicó a los Cursos de diseño arquitectónico 2 y 4 durante el primer
semestre de 2014 en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de San Carlos
de Guatemala.
Estamos
en un mundo en el que las personas están más interesada en vivir el presente inmediato que preocuparse por el futuro y menos se
interesan en entender el pasado. En un mundo en el que deslumbran los espejismos
tecnológicos y embelesan las modas ostentosas del nuevo milenio. Estamos en un
mundo que cuenta con información globalizada en tiempo real que difícilmente se
utiliza para entender y mejorar las condiciones de las grandes mayorías y que en
contadas ocasiones, se destina para hacer crecer los valores humanos, mas bien,
se aprovecha para manipularlos y degradarlos a su más mínima expresión.
Estamos ante una sociedad contradictoria inserta en
el consumismo de una vida materialista, pero
aun así, interesada en lo esotérico como forma de explicar la propia realidad;
una sociedad pendiente de la inmediatez del día a día, que asume que la verdad
está en las redes sociales; en una sociedad contaminante en la que todo puede
ser desechable, incluso la amistad y el matrimonio, una sociedad en la que
prevalece el egoísmo, en la que nada es suficiente, en la que se venera la
tecnología por su valor utilitario más que por sus potenciales aportes al
desarrollo de la humanidad.
A pesar de que las condiciones actuales facilitan
infinidad de recursos para enfrentar los complejos proceso de enseñanza, estos todavía
no logran articularse con los procesos sociales, académicos, ambientales y
teóricos. Es claro que esta situación no se da por limitaciones técnicas sino
por anacronismos o descuidos referenciales y conceptuales; muchos de ellos,
debido a la resistencia al cambio o a la falta de un esfuerzo intelectual para asumir
las nuevas e incontenibles avalanchas cognitivas y técnicas.
Muchos diseñadores ignoran o cuestionan la
relevancia de los fundamentos teóricos, contextuales y epistemológicos en una
sociedad pragmática que se ve agobiada por el caos posmoderno en el que
prevalecen la ambigüedad, la subjetividad, la inestabilidad y el desapego.
La arquitectura es un flujo de ideas transformadas en
volúmenes que moldean espacios intencionales para que sean disfrutados o
consumidos por los seres vivos. No está aislada de los contextos sociales y
naturales y tampoco dista de lo teórico, lo metodológico y lo tecnológico que
afectan un mundo en constante evolución. Por consiguiente, se ve influenciada
persistentemente por los cambios en la ciencia, en la tecnología, en la
economía y en el ambiente, y se constituye en un filtro que, de una u otra manera,
responde a los cambios de la realidad y del medio en que se desarrolla. Ha sido producto de las condiciones
socioeconómicas, culturales y técnicas y se le atribuye ser el principal
testimonio de la historia.
El diseño es un acto creativo que encierra ideas que a
veces pareciera que surgen de la nada o que derivan lógicamente de una
necesidad puntual. Algunos defienden que requiere procesos secuenciales,
lógicos y racionales. Otros dan poca
importancia a los procesos, no importa cómo, aunque misteriosamente se llegue a
encontrar soluciones. Pero hay algunos
más, que buscan entender las causas y demandan información del cometido y del
contexto, y aprovechan la experiencia (propia y ajena) para la sedimentación
mental que anticipa respuestas efusivas, que apasionan y propician el famoso
salto al vacío creativo.
Durante el desarrollo de este trabajo, se ha ido
construyendo sobre un basamento diacrónico, un encuentro de enfoques y visiones
que permiten aseverar que son poco productivas las posturas dogmáticas y
cerradas, basadas en necedades contradictorias. Se sostiene que al final, toda
información coherente, toda reflexión teórica o empírica puede constituirse en
sustento para la imaginación productiva y para estimular el flujo creativo.
Es por eso que esta tesis partió de un criterio flexible
sobre la base de múltiples dudas e ideas difusas que sirvieron de marco para
identificar el problema que llegó a concretarse en un sistema de proposiciones
concatenadas que derivaron en una hipótesis de trabajo. Esta se fue disgregando en hipótesis
derivadas, en variables e indicadores, en conceptos y dimensiones que esbozaron
un camino a seguir dentro de la maraña de la compleja realidad.
El proceso evolutivo de la ciencia y de las distintas
concepciones metodológicas del diseño demuestra que han concurrido una serie de
intentos para explicar procedimientos de acuerdo con los paradigmas
prevalecientes en distintas épocas, en especial, a partir de los enfoques
científicos. En algunos casos, se
presentaron elementos para descubrir los criterios lógicos y racionales del
diseño, pero en otros se incluyeron aportes menos estructurados sobre lo que
los procesos creativos pueden hacer para el perfeccionamiento del diseño. Desde el último cuarto del Siglo XX se habla
de las tendencias de diseño que parten de una visión holística para el
entendimiento de las decisiones del diseño en función de las distintas
variables que lo constituyen. Pero no
siempre se ha reconocido la importancia de esta visión para desarrollar la
creatividad.
A lo largo de la historia, de manera consciente o no,
se ha presentado la paradoja entre la creatividad y el método. Y es que la
creatividad es difusa e intuitiva, no mensurable. En tanto que el método puede
llegar a considerarse una guía normativa que organiza y delimita y no
necesariamente, propicia la libertad y la fluidez para dar luces a la compleja
generación del flujo creativo.
Para valorar la dinámica creativa del diseño es
necesario partir de que el mundo cambia en cada momento, que los conocimientos
son desplazados o mejorados continuamente y que la realidad se modifica minuto
a minuto, por tanto, las soluciones encontradas para un caso particular, no
necesariamente serán efectivas para otro.
Esto significa que el aprendizaje requiere de una actualización continua
y, por consiguiente, una mayor disposición para adaptarse a estos incesantes
cambios y esta adaptación demanda capacidad creativa.
Si bien el conocimiento es básico y una fuente para
favorecer el desarrollo de la imaginación fundamentada, es la creatividad
la que determina su utilización
efectiva, es la que propicia la estrategia para hacer frente de manera
efectiva, a los nuevos problemas de diseño.
Pero el estímulo a la creatividad en los procesos de
enseñanza obedece a otra serie de variables que también se consideran
determinantes y que propiciaron la construcción de una hipótesis de trabajo que
se formula de la siguiente manera:
La creatividad en el aprendizaje del Diseño se ve
influenciada por tres condiciones relevantes: lo técnico metodológico
implementado por los docentes, las orientaciones de la institución educativa hacia el proceso de
aprendizaje del diseño y las aptitudes propias del estudiante. Los aspectos técnico metodológicos están en
función de los procesos de enseñanza que utiliza el docente, de la incidencia
de la tecnología en el diseño y de los métodos y estrategias de diseño. La
institución determina los lineamientos académicos, el contexto de aprendizaje y
el producto de diseño que se pretende, en tanto que las aptitudes del
estudiante obedecen a su formación, su experiencia y sus características
individuales.
En relación directa los objetivos
formulados en la tesis procuraron: establecer criterios teóricos y
epistemológicos para el análisis de los métodos de enseñanza y de diseño en la
arquitectura en relación con la creatividad; analizar la enseñanza del diseño y
su relación con el desarrollo de la creatividad; evaluar la incidencia que
tienen los lineamientos institucionales en los enfoques metodológicos de diseño
y las estrategias de enseñanza para el desarrollo de la creatividad y, hacer
propuestas que contribuyeran a propiciar el desarrollo de la creatividad en la
enseñanza del diseño.
Para alcanzar los objetivos se fueron
obteniendo resultados progresivamente; por ejemplo, se contrastó el proceso
evolutivo del método en relación con concepciones metodológicas y de enseñanza
del diseño; esto facilitaría comprender la evolución del pensamiento en
distintas ramas como la ciencia, la educación y el diseño que, de una u otra
manera, han mantenido un cercano vínculo de desarrollo a través de la
historia. También era necesario
construir un modelo para el procesamiento y análisis de las variables que inciden
en la enseñanza del diseño y el desarrollo de la creatividad, el cual se hizo
por medio de la operacionalización de la hipótesis. Se perseguía analizar la
incidencia de los lineamientos institucionales en los enfoques metodológicos de
diseño y las estrategias de enseñanza para el desarrollo de la creatividad. Dado
el carácter sincrónico del estudio de casos la información de campo se obtuvo
para el primer semestre del 2014.
La comprobación de las hipótesis y los
objetivos planteados se fueron alcanzando por medio de la definición de criterios
organizados lógicamente, que se establecieron en cada uno de los ocho capítulos
que componen la tesis. Cada uno de estos capítulos se fue revisando
permanentemente en una espiral creciente que
permitió el enriquecimiento constante de los planteamientos.
En el primer capítulo se presenta el modelo construido para
el procesamiento y análisis de las variables que inciden en la enseñanza del
diseño y el desarrollo de la creatividad.
En el segundo capítulo, se plantean los principios
epistemológicos para explicar los fenómenos de la creatividad y del diseño; se
enfatiza en la importancia que tiene la epistemología para proporcionar
fundamentos al desarrollo del conocimiento; las grandes visiones de la
epistemología, y los elementos para construir una visión epistemológica del
diseño que involucre la creatividad.
En el tercer capítulo se contrasta el proceso evolutivo
del método con las concepciones metodológicas y de enseñanza del diseño. Se aborda
el diseño desde lo etimológico, lo conceptual, lo ideológico y lo
interpretativo; la relación entre ciencia, técnica y diseño y las distintas
posiciones desde lo científico y lo ideológico; se revisan las concepciones
metodológicas que se han seguido a lo largo las últimas décadas, las
perspectivas conceptuales, la relación entre inteligencia y creatividad, y la
paradoja entre lo irracional e intuitivo contra lo lógico racional.
En el cuarto capítulo, se reflexiona sobre enfoques y
modelos de enseñanza; se analiza el fenómeno de la modernidad y el de la
posmodernidad como escenarios que han influido en el entorno teórico cultural
de las últimas épocas; se analiza la complejidad como parte de una visión
actual de la ciencia en la que se esbozan posturas que atañen al diseño y la
arquitectura, y se hacen algunas consideraciones sobre la tecnología y su
incidencia en el aprendizaje del diseño.
En el capítulo cinco, se reflexiona sobre la
trascendencia de la institucionalidad en el diseño y la creatividad y se
discurre por el proceso evolutivo de la Facultad de Arquitectura, para
posteriormente inspeccionar los criterios y lineamientos que se utilizan para
orientar la enseñanza del diseño.
En el capítulo seis, se identifican las características
de los docentes que aportaron a los procesos de enseñanza del diseño arquitectónico
durante el período en estudio. Se
interpretan y valoran sus opiniones en torno al tema de la enseñanza, de los
aspectos que inciden en el desarrollo creativo y de las estrategias y procedimientos
que utilizan.
En el capítulo siete, se identifican las
características de los estudiantes de los cursos estudiados, en el período en
análisis, que se relacionan con sus aptitudes, formación, experiencia y
motivación para enfrentar el aprendizaje del diseño y su relación con el
desarrollo de la creatividad en el aprendizaje.
El último capítulo incluye una síntesis conclusiva referenciada al
sistema de hipótesis, para contrastar la lógica de las proposiciones iniciales
con los fundamentos e información obtenida; se hacen consideraciones para proponer
un marco teórico y epistemológico y se proponen lineamientos institucionales para
favorecer el desarrollo de la creatividad. Finalmente se hacen una serie de
recomendaciones para hacer operativa la propuesta.
El estudio, construido a lo largo de cuatro años, llevó
a reflexionar sobre la larga discusión entre lo objetivo y lo subjetivo, entre
lo racional y lo intuitivo, entre lo mágico y lo científico. La posmodernidad y
la complejidad plantearon una nueva lógica: el mundo no es tan sencillo como
para circunscribirse en dicotomías como el blanco o el negro, lo bueno o lo
malo, la izquierda o la derecha. La realidad posmoderna, con todos sus matices,
es incluyente y vinculante, pero también es imprevisible y cambiante.
La capacidad abarcadora del positivismo con
sus tradicionales visiones racionalistas y empíricas, ha sido desgastada por su
insistencia en querer transformar la complejidad de los fenómenos sociales en
datos posibles de estandarizar y
simplificar. Ya no se vale obligar a homogenizar resultados, las personas y las
comunidades tienen sus propias particularidades y contextos, hay que
entenderlos y explicarlos dentro parámetros más abiertos e incluyentes.
Más que seguir modas o
importar estéticas complejas, hoy se necesita reflexionar sobre la complejidad
social, cultural y natural que debe considerar el diseño en su fase de
investigación y fundamentación. Esto implica percatarse de los procesos de
desculturización y de la fuerte carga psicológica y mediática que orienta hacia
el consumismo. Ser verdaderamente conscientes de la influencia de los medios y
redes sociales y cómo inciden en los valores académicos y culturales locales que
tienden a disiparse ante las tendencias globales.
La problemática del diseño es compleja, indefinida y
llena de retos diferentes para cada nuevo tema a resolver. Es desordenada, si no es que caótica y está
caracterizada por contradicciones y valores distintos que obedecen a una lógica
enmarañada que se integra a un sistema de redes y relaciones que se apoyan en
la omnipresencia de la tecnología como parte del trajín diario. Y es que nos
guste o no, el diseño está indiscutiblemente relacionado con los avances
científicos y técnicos que siguen abriendo posibilidades antes impensables,
para tratar de entender un mundo diferente, complejo, impredecible y con nuevas
condicionantes sociales y ambientales.
Los estudiantes cuentan hoy con ilimitados recursos
para responder a los nuevos requerimientos de aprendizaje. Esto demanda que los docentes asuman nuevas responsabilidades
y retos, que sean capaces de adaptar nuevas formas de pensar, y por
consiguiente que se actualicen permanentemente para dar respuestas oportunas a
los nuevos paradigmas en los que inevitablemente están involucrados.
La nueva enseñanza del diseño debe aprovechar las
bondades que la actualidad presenta para atender con eficiencia el mejor uso de
los recursos renovables y no renovables, así como la búsqueda de la eficacia en
función de las necesidades y recursos de nuestra propia realidad.
En fin, los acelerados cambios que se han
dado en la sociedad, en la ciencia y en la tecnología, requieren de una
minuciosa y permanente revisión para la generación de estrategias que
contribuyan con la enseñanza, que aporten tanto a las aplicaciones prácticas como
a las interpretaciones científicas, que faciliten el abordaje del diseño dentro
de la realidad compleja y definan la apertura de nuevas vías de creatividad que
la actualidad y el futuro demandan. Es decir, se necesita impulsar una nueva
racionalidad que propicie el conocimiento sistemático, pero que también
contribuya con el desarrollo de la creatividad.
Para concluir deseo
compartir la última parte del prólogo de la tesis, en el que, entre otras
confesiones, expreso:
Tardé algún tiempo
en percatarme de la omnipresencia de la creatividad en la enseñanza y en todo
lo que hacía. Hasta que un día, la luz se hizo y entendí que la razón y la
imaginación son las dos caras de esa moneda que lanzada hacia arriba o hacia
abajo, cae de canto; porque… no hay absolutos.
De mis clases
rígidas y obstinadamente estructuradas pasé a criterios más abiertos. Las
clases se llenaron de claridad, de juegos, de aceptaciones tácitas, de
complicidades positivas, en las que lo que interesaba era el aprendizaje
compartido. Quedaron por un lado los formalismos innecesarios y pasamos a la
flexibilidad responsable. La exigencia productiva no necesitaba de fachadas, y
la fluidez formó parte de la naturaleza que prodiga la energía juvenil, que
llena y hace crecer el espíritu del docente.
Esa fue la fuente
del sentido de la frase aquella que dicta que no hay mal alumno sino mal
profesor. Aprendí a creer en los
alumnos, a ceder y entender que no hay realización sin dar y sin ser. Y es que
esa energía que prodiga la juventud, que entusiasma, que provoca, hace pensar
de nuevo que todo es posible.
Por eso pretendo
que es posible hacer aportes para un mundo más creativo en el que las ideas
sobrepasen a la fuerza bruta, a los dogmas y a la estrechez de mentes. Por eso
creo en la intuición creativa, por eso aplico, donde puedo, el efecto
Pigmalión, si, ese que afirma que si uno cree lo suficiente en las personas,
estas serán capaces de logros que no creyeron posibles, y por eso, seleccioné
el tema para escribir esta tesis.
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