RESUMEN
La tercera década del siglo XXI puso en jaque a instituciones y sociedades del mundo. Por un lado, las crisis económicas, políticas y sociales a nivel global y local, los crecientes desastres naturales que han arrasado innumerables comunidades en todo el orbe y por otro la pandemia que cambió la estructura educativa con la incorporación obligada de la tecnología. A ello se suman las alteraciones culturales de la juventud generadas por las redes sociales, el imparable y abarcador uso de dispositivos electrónicos; el fácil acceso a información y recursos, y más recientemente, la invasión de la inteligencia artificial. Todo forma parte de una realidad insoslayable para la que no sólo debemos preparar a las nuevas generaciones, sino aprender a adaptarnos nosotros mismos.
En medio de ese incierto escenario tenemos la oportunidad para hacer una revisión de principios, contenidos, técnicas y métodos en la formación y plantear una estructura curricular que favorezca la integración académica y mejore la eficacia del aprendizaje.